

Fecha: 15-20 de julio de 2008
Pontífice: Benedicto XVI
Tema: «Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros, y seréis mis testigos» (Hch 1, 8)
Himno: Receive the Power (Recbid la Fuerza)
El mensaje del Papa evocó con fuerza la relación entre el Espíritu Santo y el creyente, marcada por el testimonio personal a la verdad. El Papa les pidió expresamente a los jóvenes que fuesen «profetas de una nueva era», conscientes de la continua y activa presencia en la vida de la Iglesia de la tercera persona de la Trinidad. Les invitó a medir la cualidad de su fe en el Espíritu Santo, y a fijarse en el acontecimiento de Pentecostés, en el «Consolador» prometido por Jesús antes de su muerte en cruz. Dos las notas más significativas referidas al Espíritu Santo presentes en el mensaje para la XXIII JMJ: El Espíritu es Principio de comunión y Revelador de la Verdad. La primera se realiza en la oración común, la piedra clave para vivir una comunidad con «un solo corazón y una sola alma»; la segunda se refiere al Espíritu como «Maestro interior», el único puede abrirnos a la fe y permitirnos vivirla cada día en plenitud. Él nos impulsa hacia los demás, enciende en nosotros el fuego del amor, nos hace misioneros de la caridad de Dios». Nuestra fe se se fortifica a través de los tres importantes sacramentos de la iniciación cristiana: Bautismo, confirmación, eucaristía.
Todas las intervenciones del Santo Padre: https://www.vatican.va/content/benedict-xvi/es/travels/2008/outside/documents/australia.html
Síntesis elaborada sobre la base de la ficha publicada por frontierarieti.com, órgano de la Diócesis de Rieti